“Sin duda, una de las macrotendencias más fuertes es el tema de la sostenibilidad, las personas buscan productos que sean amigables con el medioambiente, creados a partir de materiales reciclados o reciclables”, comenta Luis Felipe Calderón, gerente general de Tejidos LAV.
A esto se suma que los productos, en el caso de esta compañía colombiana, los tapetes, deben ser duraderos, “deben perdurar en el tiempo, no solo en cuanto a calidad sino en diseño”.
Para este 2023, Felipe explica que veremos muchos tapetes de look artesanal –incluso en los producidos industrialmente–, junto a otros más orgánicos, también de líneas más curvas y, en especial, con mucho volumen y textura. Esto último logrado a partir de la mezcla de fibras a diversas alturas.
En colores “estamos yendo a los tonos más frescos, como el beige, y a los relacionados con la tierra. En algunas colecciones tendremos muy presente el terracota, el dorado y el verde, junto a los grises que representan las piedras”. Esto enfatiza más aún la tendencia sostenible, en busca de que volquemos la mirada hacia la naturaleza y su importancia.
A través de los colores en los tapetes se les da más alegría a los espacios.
Durante una temporada, el concepto en cuanto a paredes, pisos y superficies fue la simpleza. Las texturas lisas son más fáciles de limpiar y ayudan a dar una sensación de amplitud y claridad. Sin embargo, los estilos sencillos y planos corren el riesgo de parecerse entre sí. Este año se multiplican las posibilidades: los colores vivos para los muros son una opción. También se puede acudir a papeles de colgadura con patrones tropicales, cenefas y revestimientos texturizados, según el gusto de cada quien
1. En tamaños de tapetes se imponen los grandes, para que todos los muebles queden dentro de estos.
2. Las formas menos tradicionales, poco a poco, toman fuerza en este 2023.
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