Diseñado por el estudio de arquitectura, -Efficiency Lab for Architecture,, el proyecto New York Small World es una renovación interior de la segunda planta de un edificio en Manhattan, de la Escuela del Mundo, para ampliar su actual Centro de Día. En el corazón del recién transformado nivel de Small World se encuentra una Sala de Movimiento interior, un paisaje de juego ondulado que fomenta el descubrimiento, la creatividad y la exploración.

Para facilitar un flujo más abierto a través del espacio de Small World, Efficiency Lab for Architecture reconfiguró la distribución de la planta. Las zonas centrales, que antes se utilizaban como oficinas, se han transformado en una zona de juegos, mientras que cuatro aulas se han renovado con nueva iluminación, carpintería y mobiliario para conformar un entorno de aprendizaje más acogedor y funcional. Las aulas están diseñadas para integrar materiales naturales como el suelo de madera. Las paredes están revestidas con superficies adhesivas para exponer los trabajos de los niños y crear un espacio de aprendizaje interactivo. El alcance del proyecto es de 4.345 pies cuadrados e incluye una nueva sala de movimiento, nuevos baños, una nueva oficina y actualizaciones de las aulas y los pasillos existentes.

Al situar estratégicamente la Sala de Movimiento en el centro de la planta, el diseño maximiza el acceso de los alumnos a todas las aulas y prepara el terreno para una interacción más participativa.

«Diseñar para la empatía ha sido un concepto clave para todos nuestros proyectos escolares», dice Aybars Asci, fundador de Efficiency Lab for Architecture. «Para New York Small World, diseñamos un entorno divertido para el aprendizaje social a través del juego».

El paisaje de juego interior personalizado está diseñado como un entorno en el que las sensaciones físicas de los niños pueden participar plenamente, permitiéndoles utilizar todo su cuerpo y fortalecer sus músculos mediante el gateo, la carrera y los saltos. Diseñado específicamente para niños pequeños, una edad en la que los niños están desarrollando activamente sus habilidades motoras, el espacio de juego permite a los niños poner a prueba los límites físicos de lo lejos que pueden correr, y lo alto que pueden trepar y saltar. La Sala de Movimiento es protectora, pero fomenta la asunción de riesgos, el descubrimiento y la creatividad a través del juego. Las piezas tapizadas forman rincones y nichos, curvándose alrededor de las esquinas y las columnas del espacio para favorecer el movimiento y la experimentación. Los niños pueden reorganizar muchas de las piezas para dar forma a su propio entorno, lo que permite una sensación de participación activa y compromiso directo.

La geometría del espacio de juego se caracteriza por formas onduladas que pasan sin problemas de cóncavas a convexas, lo que permite a los niños tener una fluidez de movimiento mientras juegan dentro y alrededor de la Sala de Movimiento. En varios momentos, las curvas ondulantes del paisaje de juego se envuelven para formar nichos en forma de huevo. Estos espacios en bucle crean una diversidad de experiencias al fomentar una actividad más lenta; ofrecen a los niños un espacio para descansar y esconderse dentro de la continuidad fluida del paisaje de juego, que facilita un movimiento más rápido.

Como explica Asci, «las formaciones geométricas fluidas del paisaje de juego animan a los niños a desarrollar una serie de movimientos al interactuar con la arquitectura».

En el paisaje de juego de Small World, los niños aprenden a través del juego social, así como a través de un descubrimiento más contemplativo e individualizado. El acolchado que rodea los elementos del paisaje de juego y la elección de tejidos suaves que envuelven las formas no sólo crean un entorno seguro, sino que también ofrecen superficies táctiles acogedoras. La elección del color azul para la Sala de Movimiento crea una sensación de profundidad y amplía los límites visuales del espacio.

La mayoría de los equipos de juego son adecuados únicamente para su instalación en el exterior y, según el código, no se aceptan para interiores debido a su uso de plásticos estándar para parques infantiles. Sin embargo, el sistema personalizado de Efficiency Lab for Architecture está diseñado específicamente para el juego en interiores, con materiales que cumplen la normativa, como la madera contrachapada totalmente ignífuga, envuelta en un acolchado resistente a los impactos con un tejido de alta calidad y fácil de mantener.

Otra consideración primordial en el diseño del entorno de juego fue la seguridad. Todas las superficies tienen una capa de acolchado mínima de ½». Todas las superficies verticales que dan al área de movimiento están cubiertas con un mínimo de 2″, que es el estándar de la industria para el acolchado de paredes. Además, el diseño se probó hasta una altura de caída de 1,5 metros, lo que supera con creces las alturas a las que los niños podrían subir dentro de la zona de juegos.

El Pequeño Mundo de Nueva York forma parte del largo trabajo del Laboratorio de Eficiencia para la Arquitectura con Avenues: The World School, que diseña espacios para la educación en todo el mundo, contribuye a la investigación y colabora en el desarrollo de los entornos de aprendizaje del futuro. El trabajo de Efficiency Lab for Architecture abarca desde la planificación maestra de campus hasta el diseño de mobiliario, en Nueva York, Silicon Valley, Miami, Shenzhen y São Paulo.

Ubicación: Nueva York, NY
Programa: Guardería: aulas, sala de movimiento con juegos, espacios de apoyo, oficina
Superficie: 4.345 pies cuadrados
Arquitecto, diseño de interiores, FF&E: Efficiency Lab for Architecture
MEP: TWIG Engineering
Iluminación: Claude R. Engle
Acústica: Longman Lindsey
Contratista general: Taurino
Fabricante de la estructura de juego: Situ Fabrication

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